sábado, 12 de enero de 2013

CUIDA A LAS PERSONAS QUE AMAS...


Había una vez......

Había una vez una joven que tenia de todo: hijos perfectos, un marido maravilloso, un buen empleo que le daba muchísimas gratificaciones y una familia muy unida. Lo extraño es que ella no podía conciliar todo eso. El trabajo y los quehaceres la ocupaban todo el tiempo y su vida siempre era complicada en algunas áreas. Si el trabajo le tomaba mas tiempo, ella tomaba tiempo de los hijos, si surgían problemas, ella dejaba de lado al esposo para tener mas tiempo para resolverlos, y así las personas que ella amaba y sus necesidades pasaban a segundo lugar para más adelante.

Un día su padre, (un hombre muy sabio), le dio un hermoso regalo, UNA FLOR muy cara y rara de la cual solo existía un ejemplar en todo el mundo, era única, irrepetible. Al entregársela a la hija, este le dijo: ” hija, esta flor te va a ayudar mucho, ¡más de lo que te imaginas! Tan solo tendrás que regarla, podarla de vez en cuando y a veces conversar un poco con ella y a cambio, te dará un perfume maravilloso y flores divinas. La joven quedó muy emocionada. A fin de cuentas la flor era de una belleza sin igual.

Pero el tiempo fue pasando, los problemas surgieron, el trabajo consumía todo el tiempo y su vida continuaba agitada y confusa que no le permitía cuidar de la flor.

Ella llegaba a casa, miraba la flor y estaba viva, no mostraba señal de debilidad o de estar marchitándose, apenas un poco descolorida, pero aún linda y perfumada, entonces ella pasaba de largo, aspirando embelesada el aroma que ésta dejaba en la casa.

Hasta que un día, sin darse cuenta la flor murió, ella al llegar a casa se llevó un tremendo susto y una honda pena, la bella flor ahora estaba marchita y sin vida, la raíz reseca, sus hojas caídas, oscuras y arrugadas. La joven lloró mucho y contó a su padre lo que había sucedido.

Su padre le respondió: “Yo ya me imaginaba que eso ocurriría, lamentablemente no puedo curar tu pena dándote otra flor igual a esa que pueda compensar su falta, porque era única, así como tus hijos, tu marido, tu familia, tus amigos… Tienes que aprender a regarlos, podarlos y darles atención, pues al igual que la flor que has perdido, los sentimientos también se mueren y se marchitan.
Te acostumbraste a ver la flor siempre ahí, siempre florecida y perfumada y te olvidaste de cuidarla.

¡CUIDA A LAS PERSONAS QUE AMAS!

“LOS CUENTOS SIRVEN PARA DORMIR A LOS NIÑOS Y DESPERTAR A LOS MAYORES “

Abrazote a todos y buen fin de semana Laura Cornejo

♥☻♥☻♥☻♥ 



13 de enero de 2013 14:54
Blogger Fray Rodolfo de Jesús Chávez Mercado O.C dijo...
Querida Laurita, saludos.
Un cuento maravilloso con una gran enseñanza. En verdad hay que cuidar y regar cada día lo que tenemos, para luego no lamentarnos.
Un fuerte abrazo y Dios te bendiga.
31 de enero de 2013 10:07
Blogger LORENA VE dijo...
Hola como estas tanto tiempo tengo abandonado mi blog... ya no me visitan como antes espero algun dia volver a recibir las visitas de todas ustedes que hacian mi blog mas felizzzz te dejo un beso!!!!!!
5 de febrero de 2013 00:44
Blogger AMBAR dijo...
Persdón Laura por siempre pasar de retraso, pero no me olvido de ti, solo que al saludarnos en facebook, paso menos por los blogs, de momento ando atareada y cada dia con menos tiempo.
Así es la leccion que este padre le da a su hija, familia, amigos y todo en nuestro entorno pierde fuerza si sufre el olvido, procuraré tenerlo siempre presente.
Un abrazo.
Ambar
7 de febrero de 2013 14:56
Anónimo Anónimo dijo...
J'apprécie beaucoup tous de la lecture informative sur miscyberamigos.blogspot.ru. J'ai très certainement se passer le mot sur votre site avec les gens. Cheers.
8 de febrero de 2013 23:07

lunes, 7 de enero de 2013

PROMETEME...


Prométeme que siempre
serás benévolo contigo mismo.
Que te mirarás al espejo,
y comprobarás que eres hermosa/o.
Pedirás tres deseos.
Serás fuerte.
Alimentarás tu alma.
Te librarás de todo dolor.

Ahuyentarás toda ira.
Te tomarás momentos para ti.
Buscarás inspiración.
Aprenderás.

Prométeme que siempre...

Creerás en los cuentos de hadas
y en la magia de tus sueños.
Descubrirás que esos sueños
se harán realidad.
Te abrazarás.
Sentirás el calor del sol.
Volverás a creer.
Sonreirás.
Buscarás motivos para reír.
Nunca olvidarás que tienes
un ángel guardián
que te protege.
Buscarás esperanzas.

Prométeme todas esas cosas...

y te prometo que tendrás un año

muy pero muy FELIZ!!!

ABRAZOTE A TODOS

DE LAURA CORNEJO